Rvdo. Jacinto Morán de Butrón

Sacerdote jesuita e historiador nacido en Guayaquil el 9 de mayo de 1668, hijo del capitán Jacinto Morán de Butrón y Ponce de León -Procurador General del Cabildo de Guayaquil- y de la Sra. María Ramírez de Guzmán.

Sus primeros estudios los realizó en el convento de Santo Domingo de su ciudad natal, y cuando tenía dieciséis años de edad viajó a Quito para ingresar a la Compañía de Jesús, donde se destacó por su notable y despejada inteligencia, tanto en los estudios como en las tareas que le imponía su estado religioso.

En 1695 fue nombrado Procurador de Ibarra, y posteriormente volvió a Quito, donde fue profesor de Filosofía en la Universidad Pontificia de San Gregorio Magno.

En el campo de la educación desarrolló una intensa actividad a través de diferentes cargos y funciones que supo complementar con sus obligaciones de carácter pastoral y religioso. Fue Procurador del convento de Riobamba en 1702; en 1710 pasó a Popayán y fue Vicerrector del colegio de los jesuitas durante dos años, y más tarde, desde 1715 hasta 1719 fue Rector del mismo plantel. Finalmente, en 1726 pasó a residir en Guayaquil donde fue famoso por sus elocuentes y sabios sermones pronunciados en la iglesia de Santo Domingo.

Fue un escritor distinguido cuyas obras merecieron el elogio de las autoridades entendidas en las materias que desarrolló; prueba de ello son: “Curso de Lógica, Física y Metafísica”, “Comentarios sobre los Ocho Libros de Física de Aristóteles”, “Vida de la Venerable Virgen Mariana de Jesús”, en 5 tomos; y finalmente, “Compendio Histórico de la Provincia, Partidos, Ciudades, Astilleros, Ríos, y Puerto de Guayaquil en las Costas de la Mar del Sur”, con un plano grabado por Paulus Minaret. Esta obra fue publicada en Madrid en el año de 1741, equivocadamente dándole su autoría a don Dionisio de Alcedo y Herrera, quien fuera vigésimo Presidente de la Real Audiencia de Quito. (x)

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Casi veintitrés años permaneció radicado en Guayaquil dedicado a su noble labor pastoral, hasta que la muerte lo sorprendió el 6 de mayo de 1749.

(x) Esta aseveración la sostiene el padre Mario Cicala, autor de la obra “Descripción Histórico-Topográfica de la Provincia de Quito”, y la reafirma el padre Juan de Velasco en su “Historia del Reino de Quito”.

Portada de la primera obra que se escribió sobre Guayaquil, y que fue publicada en Madrid, en 1741, bajo la autoría de Dionisio Alcedo y Herrera. En ella aparece también el primer plano que se conoce de la ciudad, que, aun cuando es de muy pobre trazado, permite apreciar como quedó constituida la ciudad luego de su fragmentación afines del siglo XVIII y la conformación final de lo que se dio por llamar “Ciudad Nueva”. Autores serios como el padre Mario Cicala sostienen documentadamente que esta obra es producto de largas investigaciones realizadas por el padre Jacinto Morán de Butrón.

Plano grabado por Paulus Minget y que el padre Jacinto Morán de Butrón incluyera en su obra “Compendio Histórico de la Provincia, Partidos, Ciudades, Astilleros, Ríos, y Puerto de Guayaquil en las Costas de la Mar del Sur”, que en 1741 fue editada en Madrid (indebidamente) bajo la autoría de Dionisio de Alcedo y Herrera, quien fuera vigésimo Presidente de la Real Audiencia de Quito.Esta aseveración la sostiene el padre Mario Cicala, autor de la obra “Descripción Histórico-Topográfica de la Provincia de Quito”, y la reafirma el padre Juan de Velasco en su Historia del Reino de Quito.Aun cuando es de muy pobre trazado, el plano permite apreciar como quedó constituida la ciudad luego de su fragmentación afines del siglo XVIII y la conformación final de lo que se dio por llamar “Ciudad Nueva”.

«Su personalidad está inmersa en dos corrientes: La una que determina al escritor que a la época brindó obra que aún hoy necesita ser valorada debidamente, sin ubicaciones precipitadas; y la otra, que signa a Morán de Butrón como el biógrafo de la Santa Quiteña (Mariana de Jesús), como el blanco de las polémicas las más, injustamente, negativas. Sin embargo de todo es inobjetable la contribución de este escritor a los inicios de nuestra literatura, contribución que en el escrito que describe milagrerías refleja una época llena de pictorismo, cuajada de leyendas». (Franklin y Leonardo Barriga López.- Diccionario de la Literatura Ecuatoriana)

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Efrén Avilés Pino, +35 años de estudios, investigación, recopilación y consulta de documentos, libros y archivos relacionados con la Historia y la Geografía del Ecuador; y la Biografía de sus personalidades más notables.

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